El senador de Ibiza y Formentera, Juanjo Ferrer, pide en la próxima Comisión de Radiotelevisión Española (RTVE), de la cual es miembro, que el ente público deje de emitir programas sobre tauromaquia o corridas de toros. El senador, que recientemente participó en una moción contra esta práctica, ha denunciado que «no es cultura, sino una forma de maltrato animal». Por este motivo, reclamará que se elimine de la programación de la televisión y de la radio pública cualquier programa destinado a fomentar o difundir la tauromaquia.
Ferrer ha mostrado también su preocupación por el hecho de que estos programas se emitan en horario infantil y son recomendados para menores a partir de siete años. Es el caso de Tendido Cero, que se emite por RTVE todos los sábados a las 14 horas. «No podemos tolerar que se presente de una forma normalizada la tortura animal como espectáculo a niños y niñas de tan temprana edad», ha destacado el senador. Ferrer también quiere que se elimine de la programación el podcast Espacio Toro, solo disponible en la sección web de RTVE y que se presenta como «programa educativo y de entretenimiento».
El senador ha lamentado que la tauromaquia quede fuera de la Ley de Bienestar Animal, aprobada en el año 2022 y que establece penas de seis meses hasta cuatro años de prisión para las personas que maltraten a los animales. «Es totalmente hipócrita que, por una parte, se castigue con contundencia el maltrato de los animales de compañía y, por otra parte, se permita tortura toros, clavar pinchos y hacerlos sangrar y además convertirlo en un espectáculo que se retransmite por la TVE pública», ha puntualizado Ferrer.
Por otra parte, Juanjo Ferrer ha criticado que el Parlament de les Illes Balears haya aprobado permitir a los menores de edad asistir a las corridas de toros, gracias al acuerdo de PP y VOX para modificar la ley. De esta manera, según apunta, la ultraderecha incumple claramente las objeciones que ha formulado el Comité Internacional de Derechos de los Niños en cumplimiento de la convención ratificada por España en los años noventa, donde se establecía claramente que se debe evitar «exponer a los menores de edad a violencia, incluso la ejercida contra los animales». «Es una muestra más del retroceso que vivimos en nuestras islas, donde en lugar de avanzar hacia el frente, cada vez se hacen más pasos hacia atrás», ha afirmado Ferrrer.