La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) en Baleares se ha sumado este miércoles a las quejas por la sobrecarga de trabajo que soportan las limpiadoras de institutos públicos de Baleares y ha pedido al conseller de Educación y Universidades, Antoni Vera, que reflexione sobre las condiciones laborales de estas trabajadoras.
El sindicato, mayoritario entre el personal laboral de la Conselleria de Educación, ha achacado el exceso de carga de trabajo al hecho de que las sustituciones de las personas que están de baja no se cubren, como ya alertó CCOO, que ha convocado una protesta este jueves.
Se trata de una situación "preocupante" que, a su juicio, mejoraría si se ofrecieran "contratos dignos" al personal de limpieza y no se externalice el servicio, ha incidido CSIF en un comunicado. "Indignación es lo que sentimos ante la carga laboral que padece este colectivo", han manifestado.
Este colectivo laboral, ha recordado el sindicato, fue de los primeros en incorporarse a sus puestos de trabajo tras la declaración del estado de alarma por la pandemia de la Covid-19, para desinfectar los centros educativos, y lo hizo sin equipos de protección.
"Ahora esta administración desprecia su esfuerzo sin dejarles la oportunidad de permanecer desarrollando sus funciones como personal de limpieza en una administración pública", han lamentado desde CSIF, que también ha criticado la externalización del servicio. "Plaza vacante que queda al producirse una jubilación, la Conselleria la cubre, en el mejor de los casos, con una empresa privada", han ahondado.
La administración tampoco está cumpliendo el acuerdo firmado en la anterior legislatura para habilitar vestuarios para las limpiadoras tanto de institutos públicos como de la propia Conselleria, han lamentado.
"En las manos del personal de limpieza está la salud de 170.000 personas, entre estudiantes, personal docente y laboral, que permanecen en los centros educativos más de seis horas diarias compartiendo espacios en los que, si no hay una higiene óptima, peligra la salud", han zanjado desde el sindicato.
Según el recuento realizado por CSIF, hay casi una veintena de personas que está de baja cuya plaza no se ha cubierto en diferentes institutos de Baleares. Algunas llevan unas semanas y otras desde abril, mayo o junio. En otros centros, el sindicato da cuenta de bajas que llevaban meses sin suplir que han sido cubiertas por una empresa privada u ofertas que quedan desiertas en varias ocasiones.
Ante esta situación han apelado a la "responsabilidad" del conseller de Educación, a quien han solicitado que "haga una reflexión" y considere sus exigencias de mejoras laborales.