En torno a las 10.00 horas de este martes arrancaba en la capital de Reino Unido la primera gran feria internacional del calendario turístico, la World Travel Market de Londres.
Ahora, tras el final de la temporada turística, es turno de hacer balance del resultado de ésta y plantear los futuros retos a los que se enfrenta el sector, tanto en las Islas Baleares a nivel general, como en Ibiza en particular. Para lograr este fin, y poder mantener reuniones tanto con instituciones hoteleras como operadores turísticos, como compañías aéreas Ibiza cuenta con un stand propio de 116 metros cuadrados, además de representación en el stand de las Islas Baleares, contiguo a este.
La encargada de hacer este primer balance ha sido la presidenta del Govern, Marga Prohens quien, en su presentación «Illes Balears en transformació: sostenibilitat i turisme cultural», ha asegurado que «las Baleares siguen apostando por esa modelo de contención turística en la temporada alta, pero con el alargamiento de esta». En este sentido, ha señalado que los crecimientos en los principales meses, de julio y agosto, han representado apenas un 1% «frente al crecimiento de la temporada alta y mediana».
Dividido en sectores, el turismo británico, el más numeroso para la isla de Ibiza, ha aportado 2,5 millones de personas, un ligero descenso respecto al pasado 2024, marcado por el descenso en esos picos de la temporada, en los que ha habido 20.000 turistas británicos menos en el marco de las Islas Baleares. Un decrecimiento que también se ha advertido en la temporada de 2025 del turismo alemán, otro de los principales del mercado balear.
Prohens también ha querido poner en valor el crecimiento «en valor», señalando que «el gasto medio del turista ha crecido el doble de lo que lo ha hecho el número de turistas en las Baleares». Una idea con la que pretende hacer énfasis a través del «pacto de sostenibilidad», con el que espera situar las islas «más allá del turismo de sol y playa».
Vaya payasada pagada con nuestro dinero