La sede ibicenca de la UIB acogió ayer la presentación del Anuario de la Educación de las Baleares, un completo trabajo resultado de la colaboración entre la Fundación Guillem Cifre de Colonya, la UIB y la Conselleria de Educación y Universidades. Según resaltaron sus impulsores, el anuario es una herramienta clave para el análisis y el conocimiento del sistema educativo balear.
El documento comienza hablando de las zonas educativas como espacios de gobernanza escolar. En este sentido, se aseguró que los centros se enfrentan a retos cada vez más complejos debido a cuestiones como los flujos migratorios o la digitalización, asuntos incluidos en su día a día y que están estrechamente vinculados a la persistencia de las desigualdades en las oportunidades educativas e incluso al abandono escolar. «Se trata de problemáticas con una fuerte dimensión estructural y territorial que requieren de respuestas colectivas y coordinadas más allá del ámbito escolar», afirmaron los responsables de este trabajo.
El anuario concluye además que las políticas centradas en la autonomía escolar, aunque han reforzado la capacidad de toma de decisiones en los centros, son un modelo «insuficiente» a la hora de afrontar retos estructurales como la mejora de la inclusión, entre otros.
El documento aborda además el sistema educativo no universitario en Baleares detallando sus principales indicadores. Así, según el avance de datos para el curso 2024-2025, en Baleares hay 198.140 alumnos, principalmente en las etapas de primaria (69.531 alumnos) y ESO (51.120 alumnos). Por sexo, el número de hombres es ligeramente superior al de mujeres hasta el bachillerato, cuando la tendencia cambia.
Otro dato es que el número de alumnos en centros públicos (127.445 alumnos) es superior al registrado en centros privados concertados (57.623 alumnos) y al de centros privados no concertados (13.072 alumnos). Sólo en educación especial hay más alumnado en centros privados concertados (690 alumnos) que en públicos (334 alumnos).
Entre otros datos, las Baleares presentan un porcentaje superior al estatal en cuanto a número de estudiantes en educación infantil de primer ciclo, bachillerato a distancia o FP. El alumnado de ESO en Baleares llega a los 51.120 alumnos, de los cuales un 62,9% está matriculado en centros públicos.
En cuanto a la repetición de curso, las Pitiusas registran en algunos cursos porcentajes inferiores a Mallorca. En ESO, sin embargo, Ibiza y Formentera registran una mayor tasa de repetición en segundo y cuarto de este ciclo.
En relación al porcentaje de alumnos extranjeros en centros de Baleares, la cifra ronda el 20 % tanto en escuelas públicas como privadas. El dato más elevado por territorio corresponde a los Ciclos Formativos de Grado Medio que se imparten en las Pitiusas, con un 29,2 % del total del alumnado.
El anuario destaca también el incremento del número de profesores en los últimos cursos, con 4.967 docentes más en comparación con 2015.
Los responsables del informe resaltaron cómo, con la gratuidad del primer ciclo de infantil, el número de alumnado en las escoletes concertadas ha subido este curso a 4.740 alumnos.
En cuanto a la educación universitaria, la tasa de inserción laboral de los graduados en Baleares se sitúa por encima de la media estatal, con un 83 % de afiliación a la Seguridad Social cuatro años después de su titulación.