La Guardia Civil ha intervenido en Eivissa un paquete que contenía 900 gramos de cocaína de extrema pureza en el transcurso de una operación que continúa abierta para aclarar quién iba a ser el receptor de la droga.
Las autoridades españolas tuvieron conocimiento de la llegada de este envío a la isla después de que la policía norteamericana del estado de Miami descubrieran la existencia de la droga dentro de una caja que formaba parte de un cargamento de artículos legales que iba a ser mandado fuera de sus fronteras.
La cocaína, procedente de Colombia y con una pureza que ha arrojado entre un ochenta y un noventa por ciento, se remitía a un domicilio particular de la ciudad de Eivissa como si se estuvieran enviando a través de un paquete postal distintos objetos de limpieza. La droga iba camuflada en dieciocho rollos de cinta aislante que previamente habían sido oportunamente manipulados.
La Guardia Civil, en un primer momento, dio parte a la Fiscalía Especial Antidrogas para que se concedieran los permisos necesarios para iniciar las investigaciones a fin de dar un nuevo golpe a las redes que introducen y distribuyen la droga en España.
La Benemérita, en una operación en la que han intervenido la Unidad Central de Identificación Fiscal Antidroga (Ucifa) y agentes del Gifa de Evissa, se hizo cargo del paquete hasta que fue entregado en el juzgado para que en presencia de la autoridad judicial se procediera a su apertura, encontrándose los rollos de cinta aislante con la droga. El director insular, Luis Carlos Fernández Tejerina, que ayer dio parte de la aprehensión en una rueda de prensa en la que estuvo presente el capitán de la Compañía de Evissa, Francisco Puente, aclaró que por el momento no se había detenido a ninguna persona por las características que presentan este tipo de envíos.