Miguel Àngel R.M., de 33 años, murió la madrugada de ayer a consecuencia de los martillazos que le propinó un vecino, en el barrio madrileño de Carabanchel, ya que, al parecer, la víctima tenía puesta a esas horas la música muy alta, informaron fuentes de la Policía Nacional y el SAMUR. El incidente ocurrió a las 02'40 de la madrugada. El agresor y su esposa abandonaron su domicilio tras producirse los hechos y están en paradero desconocido.
Según las diligencias policiales, el agresor y la víctima iniciaron una discusión porque Miguel Àngel R.M. tenía el equipo de música a gran volumen. Empezó una riña y el agresor dio un martillazo a la víctima que le provocó aplastamiento y traumatismo craneal. Los vecinos avisaron al SAMUR, que encontró a la víctima en el rellano del segundo piso, donde vivía. Fue atendido durante una hora y trasladado al hospital 12 de Octubre, donde falleció.
El agresor y su esposa, ambos muy jóvenes, vivían alquilados en la casa, sin que la policía disponga de más datos, mientras que la víctima vivía solo. Según la Policía, la lesión mortal se produjo con un martillo, mientras que las fuentes del SAMUR afirmaron que fue con un hacha. El arma no ha aparecido, pero sí se encontraron en el lugar de los hechos un cuchillo y un destornillador, agregaron las fuentes policiales.