Una turista italiana de 20 años vio de pronto cómo el ciclomotor que había alquilado ardía y las llamas calcinaban a otras ocho motos que había estacionado junto a la suya. Ocurrió a las cinco de la madrugada de ayer en la Avenida Isidoro Macabich cuando la joven fue a buscar a un amigo tras oler a quemado y pensar que había que cambiar una bujía. El fuego fue descubierto también por el vigilante de los juzgados, que vació dos extintores. La Policía Local intervino seguidamente y utilizó seis extintores más mientras llegaban los bomberos.
Nueve motos calcinadas en pleno centro de Eivissa