Jaime Jiménez Arbe, 'El Solitario', tenía en su propiedad abundante armamento y documentación sobre los atracos que perpetraba. Ahora, el director general de la Policía y la Guardia Civil, Joan Mesquida, confía en la pronta extradición del detenido desde Portugal, al tiempo que considera que la decisión de «insistir en la colaboración ciudadana» se convirtió en clave para la obtención de pistas fiables sobre el atracador más buscado de los último tiempos en España.
En el chalet propiedad de 'El Solitario', la policía halló dos subfusiles, una pistola, un revólver y cuatro granadas de mano.
Por otra parte, en una nave de la localidad madrileña de Pinto, el registro policial se saldó con la incautación de un fusil cetme y abundante documentación y apuntes sobre atracos. Además, en este mismo lugar se hallaron piezas de un vehículo modelo Suzuki Samurai, vehículo desde el cual podría haber disparado a los agentes navarros.
La pista policial sigue y traspasa el océano hasta Brasil, país al que «El Solitario» remitía dinero, al parecer a una mujer, cuyo paradero investiga la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta. Según las investigaciones, se sospecha que el atracador habría tratado de asentarse en Brasil tras un último robo en Portugal de no haberse producido la detención del lunes. Mesquida explicó ayer que la primera pista fiable sobre «El Solitario» se obtuvo tras su último atraco, perpetrado en la localidad zamorana de Toro. Tras este robo, las autoridades decidieron «insistir en la colaboración ciudadana» y la jugada salió bien, ya que se recibieron varias informaciones, muchas de ellas coincidentes.
Así, se pudo proceder a la detención en Portugal, haciendo uso «de un auténtico ejército de policías y guardias civiles para seguir la pista de esa personas» y un dispositivo de vigilancia «muy intenso y permanente» que detectó su traslado a Portugal.
Una vez averiguada su ubicación, las Fuerzas de Seguridad comenzaron a trabajar en el dispositivo de detención, considerando en todo momento la peligrosidad de «El Solitario», principalmente porque se sabía que «no iba a dudar en usar las armas en caso de que se viera acosado». «Hizo un amago» al tratar de abrir un maletín que transportaba, explicó Mesquida, pero «el despliegue policial era tan numeroso que se vio impedido de realizar ninguna actuación.
«El Solitario», podría ser interrogado y procesado en España mientras se enfrenta a un juicio que se prevé largo en Portugal, según declaró ayer el jefe de la Policía Judicial lusa, Alipio Ribeiro.
Jiménez Arbe fue llevado ayer ante un juez luso acusado de delitos que conllevan penas de hasta 28 años de cárcel. Ante el juzgado había una enorme expectación y varias personas al detenido.
Aunque a «El Solitario» se le imputan una treintena de atracos y el asesinato de tres policías en España, la intención expresada por Madrid de pedir su entrega puede verse obstaculizada por los cargos que pesan contra él en Portugal.
Con respecto a otros detalles sobre la investigación en España, «El Solitario» guardaba en el local de Pinto que ha registrado la Guardia Civil al menos ocho máscaras de escayola, a partir de las cuales fabricaba otras de látex con las que se deformaba el rostro.
En el momento de la detención en Fogueira da Foz (Portugal), «El Solitario» llevaba peluca y perilla postizas, chaleco antibalas y celo sobre las yemas de los dedos para no dejar huellas.