Sólo uno de los tres franceses de origen argelino acusados de una oleada de robos en Formentera en 2006 ha podido ser localizado. Los otros dos, que como éste han sido citados en numerosas ocasiones para su juicio, se encuentran ahora en busca y captura.
Los tres acusados, para quienes el fiscal pide una condena de 20 meses de prisión para cada uno de ellos, son los sospechosos de al menos una docena de robos de los que la Guardia Civil tuvo conocimiento en septiembre de 2006 y en la que se vieron afectados no sólo bañistas sino también personas que se aojaban en establecimientos turísticos de esta isla.
Todos los acusados, que ayer debían haber comparecido en el juzgado de lo Penal número 2 de Eivissa, fueron apresados en el puerto de Eivissa nada más desembarcar del buque 'Nixe' tras dos semanas de acumularse denuncias por hurto en Formentera. Los ladrones se apoderaron de una cantidad próxima a los 1.000 euros en metálico, además de otros efectos que las víctimas portaban en bolsos y mochilas. Los afectados eran casi todos turistas residentes Alemania e Italia.
Los primeros robos con los que se relaciona a dichos individuos tuvieron lugar el 18 de septiembre en la zona de ses Illetes. Los hurtos continuaron los días 25, 26 y 27 y se extendieron a Migjorn y varios establecimientos hoteleros.
Los últimos 'golpes' atribuidos al grupo se perpetraron el 29 de septiembre y se produjeron en es Caló y en las playas de Levante y Rocavella. «Uno de ellos se acercó y cuando me di cuenta había desparecido la riñonera», explicó uno de los afectados.