Miembros de los equipos de salvamento de las Pitiüses se han mostrado sorprendidos por el hecho de que en los últimos meses el helicóptero de la empresa contratada por la Direcció General d'Emergències vuele de Palma a Eivissa para atender en casos en los que, a su juicio, su labor no es imprescindible y, en otros casos, ni siquiera necesaria. Como ejemplo, hace unas semanas, en sa Pedrera, una joven sufrió un pequeño percance al lanzarse al agua. Se quedó sin respiración. El protocolo de emergencias se puso en marcha, pero un socorrista, con una pequeña barca, navegó de 'motu proprio' de Cala d'Hort a Atlantis y rescató a la joven, que no sufrió daños. Después llegó el helicóptero, que regresó a Mallorca de vacío. En total, unas dos horas de vuelo.
También está el accidente que sufrió un ciclista en un camino forestal cercano a es Vedrà. «Subimos al herido al helicóptero por vergüenza torera», recordó uno de los rescatadores. «El ciclista cayó en el borde de la carretera, en el circuito forestal, no había ninguna necesidad de helicóptero, tan sólo había que cogerlo y subirlo al Land Rover, pero como vimos que llegaba el helicóptero, pues subimos al herido», explicó. «Está muy bien la colaboración, pero es que, además, ellos sólo traen un rescatador que sólo engancha, pero no rescata», señaló.
«Despacho automático»
Otro ejemplo es el del hombre que se fracturó el peroné el pasado 21 de julio cerca de Cala Aubarca. Había que subirlo en camilla hasta donde estaba el vehículo de rescate, unos 20 o 25 minutos a pie cuesta arriba. Los rescatadores ya estaban en camino de regreso con el herido inmovilizado en una camilla cuando vieron llegar el helicóptero, que voló desde Mallorca, así que, ya que estaba allí, lo montaron y voló a Can Misses.
Algunos profesionales se sienten molestos por la facilidad con la que el helicóptero vuela de Mallorca a Eivissa, sobre todo cuando lo comparan con los problemas que ellos encuentran a la hora de que se les renueve material o se les dote de más y mejores medios.
Desde la Direcció General d'Emergències explicaron que el helicóptero vuela por «despacho automático», es decir, que en cuanto el 112 recibe una llamada que alerta de un precipitado, el helicóptero despega, ya sea para no salir de Mallorca, ya sea para volar a Menorca o las Pitiüses. Sin embargo, esto no supone un gasto extra para el contribuyente, aseguraron desde la Direcció General d'Emergències, ya que la empresa propietaria del helicóptero, contratada por la Conselleria d'Interior, Inaer Helicópteros SAU, este año tiene un contrato fijo por horas, por lo que vuelan siempre que se recibe una alerta por precipitación.
«Además, se estableció un protocolo sobre rescates por el que se fija que la aeronave sale por despacho automático, algo que se hace para agilizar trámites y también para ofrecer apoyo desde el aire: se trata de reducir al máximo los tiempos de actuación», explicaron en Emergències. En el caso de que la empresa supere el número de horas de vuelo contratadas y después surja un caso en el que realmente sea necesaria su actuación, habría que pagarlo aparte, «pero esto no ha ocurrido nunca», aseguraron desde la Direcció General.
«Servicio preventivo»
«Es también un servicio preventivo, es decir, que no sólo se usa para rescates, sino para hacer prácticas, pues estamos obligados a hacerlas, así como para la supervisión de torrentes, vigilar la situación en las playas, etcétera», añadieron. Para el Govern, que el vuelo del helicóptero sea inútil «no es un problema, ya que no representa un coste añadido».
Y en el caso de que la aeronave regrese de vacío, la tripulación siempre puede aprovechar para sobrevolar la isla y comprobar los torrentes o las playas. «Es algo que se rentabiliza», según el modo de entender el servicio que tiene el Govern.
Actualizando el Grupo de Rescate Vertical
A mediados de agosto está previsto que se realicen las pruebas a los candidatos que deseen formar parte del Grupo de Rescate Vertical de los Bomberos del Consell d'Eivissa. Este equipo está formado por nueve bomberos del Parc d'Eivissa, pero en la actualidad sólo son ocho y en breve dos de los especialistas abandonarán el grupo, al parecer por cuetión de edad.
Por tanto, son tres los bomberos necesarios para completar el grupo. Se trata por tanto de una especie de promción interna, ya que quienes remplazarán a los que se van serán también bomberos de la isla. Según el BOIB, los candidatos deberán realizar un curso que organiza el Consell d'Eivissa. Serán tres jornadas, doce horas en total. Hay que asistir al menos a ocho de las horas. Tras las pruebas, en caso de empate, será Miguel Sevilla, jefe del Parc de Bombers d'Eivissa quien elegirá a los ganadores.