Agentes del Cuerpo Nacional de Policía detuvieron anteayer por la tarde a un hombre que agredió a su hija en plena calle y ante varios testigos. El hombre, según la denuncia de la chica, que tiene 16 años de edad, le asestó un cabezazo en la boca a raíz del cual cayó al suelo. Después su padre le dio patadas en el suelo.
Ocurrió a las cuatro y diez de la tarde frente al bar La Tostada, situado en la calle Galicia, en el barrio de ses Figueretes, informaron ayer fuentes judiciales. Los testigos llamaron a la policía y M.D.C., de 57 años de edad, quedó detenido. Los agentes llevaron a la menor a Can Misses para que fuera atendida por los médicos.
Interrogatorios
Ayer estaba previsto que el hombre declarara en el Juzgado de Instrucción número 2, en funciones de guardia, con el fin de conocer más información acerca de la familia antes de tomar una decisión, como una posible orden de alejamiento del padre respecto de la chica. Al parecer ambos comparten una vivienda en la que no reside nadie más.
La trifulca comenzó en el domicilio, según las versiones del padre y la hija en la Comisaría del Cuerpo Nacional de Policía. El padre le dijo a la menor, según ésta, que se fuera de la casa y la zarandeó.
Ella dio un golpe a una vidriera con la que, al romperse, se cortó en la mano. La chica se fue de la casa y el padre la siguió. Ya en la calle se habría producido la agresión.
Ante los agentes que le interrogaron, M.D.C. reconoció haberla pegado y argumentó que la menor es «muy rebelde» y que no encuentra «otra salida para que el haga caso» que emplear la violencia.
El hombre pasó la noche en los calabozos, según varias fuentes.