El portugués Paulo Cesar Baptista será extraditado de Países Bajos a España antes de Navidad para ser juzgado en Eivissa por la muerte de Abel Ureña, quien murió a raíz de dos puñetazos que el primero le asestó el 19 de agosto en el Ushuaïa Beach Club, el local de Platja d'en Bossa en el que ambos trabajaban, el luso como responsable de seguridad y su víctima como camarero.
Desde entonces Baptista estaba desaparecido hasta que, la semana pasada, fue detenido en Amsterdam.
Nombre falso
En el Juzgado de Instrucción número 4 de Eivissa, que lleva este caso, aún no tenían noticias acerca de que Baptista vaya a ser extraditado a España antes que a Portugal, cuya Justicia lo reclama para cumplir condena de cárcel por su pertencia a un grupo mafioso. Sin embargo, fuentes conocedoras de la investigación, citando a las autoridades holandesas, aseguraron ayer que Baptista llegará a España en dos semanas o menos y que, además, el portugués no se negó a ser extraditado a España antes que a su país.
La agresión mortal quedó grabada por las cámaras de seguridad del Ushuaïa Beach Club, cuyos responsables contrataron al portugués porque presentó un NIE legal que obtuvo con una identidad falsa. Aquí en la Isla era conocido con en el nombre de José Pereira Sousa.