Parece que ser agente de la Policía Local de Santa Eulària se ha convertido en una profesión más arriesgada de lo normal durante los últimos días. Y es que tres personas han tenido que ser detenidos por atacarles cuando les instaban a abandonar sus actividades molestas o prohibidas.
Incluso, tal ha sido la virulencia de los ataques que diferentes agentes han tenidos que ser tratados en el servicio de Urgencias del Centro Médico de la localidad por lesiones
El primero de los incidentes tuvo lugar la tarde del día 24 en Sant Carles. Una patrulla se desplazó al lugar después de que varios vecinos se quejaran de tres personas estaban bebiendo y montando escándalo en la vía pública. Cuando llegaron los agentes procedieron a la identificación y les instaron a que dejaran de crear alboroto.