Eivissa y Formentera estarán durante los siguientes siete días en riesgo «extremo» de incendio, así lo advirtieron desde Ibanat y el conseller de Medio Ambiente del Consell d'Eivissa, Miguel Vericard. Las condiciones de temperatura (30 grados), de humedad (al 30%) y de viento, son perfectas para la proliferación de incendios en las islas, cuando aún se está a la espera de la extinción total del fuego de Sant Joan.
Precisamente, ayer los vecinos de la zona de Can Escandell se levantaron con un paisaje totalmente diferente. Campos quemados y aún humeantes tras el paso de las llamas del día anterior. «Estaba acostada y me levante y de repente vi humo, me subí la tejado y vi que había fuego al otro lado de la carretera y en tres minutos pasó hacia el este lado y empezó a arder y arder, vinieron los vecinos y luego Protección Civil y bomberos», recordó la mujer del propietario de la finca Can Tonicus, Joan Marí Ferrer, ayer ya más tranquila. Joan Marí estaba en el dentista cuando su mujer lo llamó y regresó corriendo a casa. «Los vecinos nos ayudaron a cortar el fuego en la parte más cercana a la casa con cubos de agua», explicó, «pero hubo un momento que el viento giró y hasta los bomberos retrocedieron, en ese momento tuve miedo, pero luego amainó, gracias a Dios», relató aliviado.
A las 11.35 horas de ayer los agentes forestales declaraban controlado el incendio que había arrasado ya con 15 hectáreas de matorrales, cultivos abandonados y masa forestal. «Ahora estamos rematando el perímetro, pero hay mucho trabajo porque es un incendio agrícola forestal con mucho árbol viejo y el fuego se ha metido dentro, una vez tengamos seguro el perímetro podremos dedicarnos a las zonas interiores», explicó un agente de Medio Ambiente ayer al medio día, «se ha quemado un tractor y algún vehículo, pero nada grave», añadió.
Depósitos de agua
El secretario de la Asociación de Propietarios Forestales, Javier Ripoll, explicó que están haciendo una campaña para recoger fondos para instalar depósitos a lo largo de toda la isla. «Ayer quedó demostrada la utilidad de estos depósitos, los helicópteros del Ibanat recogieron más 50.000 litros de agua en el de Can Garrovers para apagar el incendio», señaló. Estos depósitos contienen hasta 150.000 litros, de momento hay 10 en toda la isla pero se pretende llegar tener medio centenar para cubrir toda la superficie forestal.
Aunque estuvo cerca, el agroturismo Can Escandell no se vio afectado por el incendio, «Refresqué toda la zona perimetral y un apartamento que tenemos más apartado, y nada más, no tuvimos ningún problema», comentó la propietaria. «Llegue a las 18.00 horas, y no me dejaban entrar en casa, pero entré igualmente y como no había ningún problema pedí a Protección Civil que dejara entrar a los clientes porque no había ningún peligro», aseguró.
Otro vecino de la zona afectada explicó que la noche la pasaron tranquila, «a nosotros no nos afectó porque se quedó detrás de la línea de árboles. Yo informé del fuego, de donde estaban las casa habitadas, los puntos de agua y cómo acceder al sitio», comentó este vecino, que no quiso revelar su nombre.