El tráfico quedó ayer cortado en el Camí Vell de Sant Mateu (en Puig d'en Valls) a causa de un gran socavón que se produjo en el kilómetro 4,5 de la citada vía, a unos 300 metros del Camí des Pedrisset en dirección a Sant Rafel y a la altura del Polígono de Montecristo.
En ese punto, el asfalto sufrió un hundimiento a causa de la rotura de una tubería de la interconexión de las desaladoras de Vila y Sant Antoni. Al parecer, la acumulación de agua provocó el desplazamiento de los materiales del subsuelo, facilitando que la carretera cediera. Una carretera que no volverá a ser transitable hasta el próximo lunes.
El suceso tuvo lugar a primera hora de la mañana, según relató Juan José, un vecino de la zona que afirmó haber circulado con normalidad en el tramo afectado sobre las 06.15 horas y que se encontró el socavón, oculto por un enorme charco de agua, a su vuelta, una hora más tarde.
Inmediatamente, agentes de la Policía Local de Santa Eulària y de Sant Antoni cortaron la carretera y señalizaron caminos alternativos a conductores y ciclistas. Así, desde Puig d'en Valls a Sant Rafel se recomendó utilizar el desvío hacia el Polígono de Montecristo por la zona de s'Hort Nou. En el sentido contrario, también se dispuso un operativo apoyado por la Guardia Civil de Tráfico.
Entre tanto, empleados de la concesionaria de la desaladora, Codeisa, repararon la cañería, que tiene un caudal de 300 metros cúbicos, con la ayuda de una excavadora.
Según explicó una portavoz de la concesionaria, la avería quedó reparada por la tarde, aunque permanecía el socavón. Las tareas de relleno y asfaltado no se podrán realizar hasta el lunes, por lo que el tráfico permanecerá cerrado hasta entonces.