Al menos 18 personas han muerto y decenas han resultado heridas este miércoles al derrumbarse una fábrica de bolsas de plástico ubicada en la ciudad de Lahore, en el este de Pakistán, según el último balance difundido por los servicios de emergencias.
La fábrica, de cuatro plantas, se ha venido abajo cuando había unas 150 personas trabajando en su interior. Sibtain Shah, uno de los empleados, ha contado al diario paquistaní 'Dawn' que de repente notaron una vibración muy fuerte.
«Corrimos a decírselo al dueño de la fábrica, que al escuchar nuestra petición de evacuar el edificio fue dentro para comprobar la situación» y segundos después el inmueble se derrumbó, por lo que se cree que el propietario está entre los fallecidos, ha contado.
Los efectivos han recuperado 18 cadáveres y han rescatado a 70 personas con vida, pero temen que aún haya al menos un centenar atrapadas bajo los escombros, por lo que han alertado de que la cifra de fallecidos podría aumentar drásticamente.
Las autoridades paquistaníes han movilizado a todos los equipos de protección civil y fuerzas de seguridad, incluidos los militares, que dirigen las tareas, para acelerar la operación de búsqueda y rescate de supervivientes.
El ministro jefe de la región de Punjab, Shahbaz Sharif, ha revelado que la fábrica podría haberse derrumbado por los daños estructurales sufridos durante el terremoto del pasado 26 de octubre, si bien la investigación acaba de comenzar.
Sharif ha aprovechado su recorrido por la zona para anunciar una compensación 500.000 rupias (unos 4.300 euros) para las familias de los obreros que han fallecido en «este trágico accidente».