Un corte profundo y de unos 10 centímetros de longitud. Es la herida que presenta en su cuello Zeus, un cruce de pastor alemán atacado con una cuchilla en el interior de la finca que sus dueños tienen en es Fornàs.
«Era de noche, estábamos en casa viendo la tele y uno de nuestros hijos salió para ver qué le pasaba a los perros. Zeus y su madre, Dila, llevaban un rato ladrando. Mi hijo regresó corriendo al observar la sangrante herida que presentaba Zeus en el costado izquierdo». Así relata Toni Costa el intento de asalto a su casa la noche del jueves.
Al ver la magnitud de la herida dudaron sobre la causa del corte, «pero luego vimos que la puerta de entrada principal a la finca había sido reventada».
A la mañana siguiente vino la veterinaria y nos confirmó que el corte se había producido con un cuchillo u otro objeto con filo, ya que el corte era muy limpio. «Ahora no se le puede coser porque se le podría infectar la herida y el animal lo ha pasado mal», indicó Toni, quien apuntó que han denunciado los hechos ante la Guardia Civil.
Asalto o acto vandálico
«Hace unos años nos entraron a robar aquí y en la casa de al lado. Después de esos robos, trajimos los perros y ya no habíamos tenido ningún sobresalto hasta ahora», recordó el vecino de es Fornàs, quien lamentó y denunció la «animalada» cometida por los autores de la agresión al cachorro Zeus, que desde el ataque «se muestra muy inquieto y quizás algo agresivo con los desconocidos». Costa indica que los autores debieron utilizar un cuchillo o algo cortante atado a un palo que introdujeron a través de la valla hasta herir al animal.
El vecino de es Fornàs explicó lo sucedido a los agentes del Equipo Roca de la Guardia Civil y espera que «tomen cartas en el asunto y den con los autores porque lo que han hecho es una salvajada».
Asimismo, Costa reclamó más seguridad en la zona, «ya que estamos bastante abandonados por las fuerzas de seguridad».
En este sentido, indicó que el presidente de la Associació de Veïns de la Vénda des Fornàs, Pere Joan, trasladará el lunes diversas reclamaciones y quejas al Ayuntamiento de Sant Antoni. Los vecinos lamentan especialmente la poca presencia de fuerzas de seguridad por la zona.
Además, denuncian la celebración de fiestas ilegales en fincas de la zona que «causan grandes molestias por los ruidos y también por la invasión de vehículos que aparcan en cualquier sitio próximo a los caminos».
En este sentido, no descartan que detrás del ataque al perro Zeus se encuentre una venganza o acto vandálico de alguno de los asistentes a estas fiestas.