Agentes de la policía científica de la Policía Nacional peinaron ayer la zona cero del incendio, el escenario donde se localizaron los dos focos de fuego para recabar nuevos datos que puedan aclarar la causa, el origen y la autoría del fuego o si este se debió a un accidente.
48 horas después del incendio que arrasó más de ocho hectáreas de ses Feixes des Prat de Vila, los investigadores regresaron a la zona cero del fuego. El martes realizaron una primera inspección ocular junto a los técnicos de Medi Ambient y los agentes de la Policía Judicial pero, según explicaron, este tipo de escenarios hay que «revisarlos a conciencia, el día después puedes encontrar otros detalles que pueden ser determinantes», apuntó uno de los agentes de la Policía Nacional.
Las abejas
La pista de las cajas que podrían pertenecer a una colmena ha perdido fuerza porque no se corresponden con ninguna de las colmenas que se comercializan, por lo que, aunque se hubieran utilizado como «casa de abejas», no hay ninguno tipo de registro a seguir.
Los técnicos de Medi Ambient que analizaron el escenario apuntaron que la hipótesis que tenía más peso era la de un incendio intencionado, pero los agentes advierten que no descartan ninguna vía de investigación.
Hasta la zona donde se localizan los puntos de inicio del fuego también se trasladaron agentes del Ibanat y vecinos de es Pratet. Uno de ellos, Jaume, señaló que lo sucedido el lunes era previsible porque ses Feixes «están abandonadas. Ya van unos cinco incendios en los últimos diez años», lamentó.
La Asociación de Apicultores de Ibiza manifestó ayer su preocupación por la aparición de algunos enjambres en la zona del foco del fuego y subrayaron que es «muy raro» que un ahumador pudiera haber provocado el incendio, ya que este instrumento «fabrica humo, no fuego y por ahora todo son hipótesis». En declaraciones a Europa Press, la asociación aseguró desconocer que hubiera colmenas en la zona e hicieron hincapié en que, de ser así, hubieran «exigido a los apicultores que las retiraran porque no cumplían con la normativa. También hemos averiguado que en el registro de explotaciones apícolas no había nada», señalaron.
Asimismo, explicaron que se trata de unas casas de «fabricación casera, hecha con materiales de aglomerado y sin actividad porque se ve muy limpia. Puede ser que las casas estuvieran en la zona desde hace años, sin ser usadas porque siempre hay alguna huella apícola de la actividad, como cera o própolis», indicaron desde la Asociación de Apicultores de Ibiza, que expresó su disposición a colaborar con la investigación policial.