El juicio rápido celebrado ayer en el juzgado de Instrucción número 4 de Ibiza arrancó pasadas las 10:15 horas con la declaración de L. R., el taxista que el pasado 6 de agosto interpuso una denuncia en la Policía Nacional por amenazas e insultos a un taxista ‘pirata'.
A la pregunta de la jueza Carmen Robles de si había recibido «amenazas de muerte», el taxista respondió afirmativo y explicó que los hechos se remontan al 30 de julio cuando se encontró con I. R., el taxista ‘pirata', en la parada de una famosa discoteca donde recibió insultos.
«Fui a pedirle explicaciones de por qué había escupido a mi mujer una semana antes, que también es taxista y está embarazada», apuntó L. R. «Todo viene porque te acercas a ellos para decirles que te están quitando clientes», remarcó.
Fue ya una semana después cuando volvieron a coincidir en un conocido hotel de la isla cuando «las cosas pasaron a mayores» y, según declaró el denunciante, recibió «amenazas de muerte».
En este sentido, matizó que el ‘pirata' le dijo que «por mi madre, yo te mato porque no me importa dormir en el calabozo». Asimismo, recalcó que cuando creía que le iba a golpear, al final lanzó el puño al vehículo causando algún desperfecto. Y es que, según dijo, este hombre es «conocido» por el sector del taxi, además de ser «bastante corpulento».
Por el contrario, la parte acusada declaró que «no es cierto» que amenazara de muerte al taxista y añadió que «este señor tiene problemas con mi hermano porque le acosaba».
A la espera
Tras las declaraciones de ambas partes, la jueza pidió que aportaran las pruebas gráficas de las que dispusieran. Tanto el taxista denunciante como el acusado enseñaron los vídeos que tenían de la disputa.
Una vez vistos, la jueza destacó que tenía la sentencia «clara». Sin embargo, las partes no la conocerán hasta dentro de siete o diez días, incluso «se puede alargar más porque nos han dicho que ahora están con vacaciones».
A juicio de L. R., «dadas las palabras de la jueza parece que lo tiene muy claro y, viendo cómo le ha hecho callar, puede ser favorable (la sentencia)».
Aún así, este taxista no pudo presentar el presupuesto del arreglo del vehículo, ni las imágenes que ha pedido al hotel en las que se ven, dice, los hechos. «No he podido porque ya se ha celebrado el juicio, pero si no estoy conforme con la sentencia me han dicho que podré presentarlo», añadió.