El sábado por la tarde se inauguró la exposición de pinturas de Josep Ros en Es Polvorí, en Dalt Vila, que se podrá contemplar hasta el próximo 25 de junio en un horario de 10.00 a 13.00 y de 17.00 a 20.00 de martes a domingo.
Josep Ros, Valencia 1964, licenciado en Bellas Artes e Historia del Arte por la Universidad Politécnica de Valencia, nos presenta 17 lienzos sobre óleo de formato medio y grande siguiendo su estilo simbolista conceptual. «Le atrae trabajar con técnicas clásicas de veladuras, empezando con una base de acrílico y luego un acabado de óleo que le permite obtener mejores matices tonales»
La exposición se titula És quan dorm que hi veig clar y hace referencia a un verso del poeta Vicent Foix y también es el título de uno de los cuadros que representa a una mujer fumando opio, que nos retrotrae a la época de Baudelaire. Le gusta mucho el Simbolismo francés del XIX y los decadentistas que «tratan temas más oscuros como los de París de aquella época de la muerte y las drogas. Mediante la iconografía clásica intenta hacer una crítica de la sociedad actual».
Historia del arte
Vicent Josep García Cervera, licenciado en Historia del Arte, en su artículo «Realidades Alteradas» nos comenta respecto a la obra de Josep Ros que «la realidad puede ser alterada de muchas maneras, por la imaginación, los sueños, por la ingestión de sustancias psicotrópicas o conscientemente a través del arte y emulando las anteriores. Ya en la antigüedad clásica mediante la representación mitológica de los dioses, se usaba una realidad alterada para hacer comprender realidades no comprensibles entonces.
Josep Ros nos muestra unas realidades que parten del subconsciente colectivo, ya que responden a imágenes que todos tenemos en la retina, pero alteradas basándose en la simbología, los emblemas y sacadas de contexto. Homenajeando en sus composiciones a la pintura representativa del arte clásico occidental, como el gótico internacional, el renacimiento o el barroco mediante la técnica del óleo nos muestra en sus cuadros detalles botánicos y paisajes mediterráneos en escenas nada cotidianas. La estructura formal nos retrotrae a la pintura academicista de otras épocas, incluyendo elementos contemporáneos».
Josep Ros nos comenta que «después de la Vanguardias el arte se vuelve individualista y se pregunta si realmente nos interesa la vida de una persona en concreto y que él prefiere tratar temas colectivos como los de esta exposición, políticos y sociales actuales».