Pablo Motos recibe la noche de este martes en El Hormiguero a dos rostros emblemáticos de la interpretación española: Imanol Arias y María Barranco. Ambos actores presentarán al público su nueva aventura teatral titulada Mejor no decirlo, una comedia que llegará al Teatro Bellas Artes de Madrid el próximo 3 de octubre. La obra plantea la historia de un matrimonio de larga duración cuyo secreto para la convivencia reside en saber cuándo hablar y cuándo callar, aunque la trama dará un giro cuando decidan expresarlo todo sin filtros.
Lo que muchos espectadores desconocen es que Imanol Arias cuenta con una distinguida vinculación al mundo vitivinícola. En 2019, hace ya seis años, el intérprete recibió el nombramiento de Veremador d'Honor de la Denominación de Origen Protegida Pla i Llevant en Mallorca, un reconocimiento que le permitió cosechar el primer racimo de uva de aquella temporada. Durante el acto, el actor cautivó a los asistentes con un emotivo discurso donde ensalzó la tradición vinícola, demostrando su profundo conocimiento y pasión por esta cultura milenaria. El título de Veremador d'Honor representa un reconocimiento tradicional en regiones vinícolas como Mallorca, donde se otorga a personalidades que han contribuido significativamente a la promoción y valorización de la cultura del vino.
Este honor conlleva el privilegio simbólico de dar inicio a la temporada de vendimia cortando el primer racimo, marcando así el comienzo oficial de la cosecha anual. El hecho de que Imanol Arias recibiera este galardón en 2019 demuestra que su vinculación con el mundo del vino trasciende el ámbito meramente comercial para adentrarse en el reconocimiento cultural y tradicional, aspectos muy valorados en el sector enológico español. Más allá de su destacada carrera en producciones como Cuéntame cómo pasó, donde dio vida al inolvidable Antonio Alcántara durante más de dos décadas, Arias ha desarrollado una notable trayectoria en el sector enológico que trasciende el simple aficionado.
Su compromiso con el vino va mucho más allá de la mera degustación, habiendo participado activamente en diversos proyectos vinícolas a lo largo de su vida. Una de las iniciativas más destacadas del actor en el mundo del vino es su colaboración con Bodegas Juan Gil de Jumilla, con quienes creó el vino 'Bruto'. Este proyecto no constituye simplemente un ejercicio de imagen, sino que representa una implicación real y profunda del intérprete en el proceso creativo. Elaborado principalmente con uva Monastrell y sometido a una crianza de aproximadamente 20 meses en barricas de roble francés, este caldo refleja la pasión del actor por la enología de calidad.
Arias no se limita a prestar su imagen, sino que participa activamente en las decisiones sobre el coupage y en el seguimiento de toda la elaboración del vino y es que el vínculo del actor con el mundo vinícola parece tener raíces profundas en su historia personal. En diferentes entrevistas ha manifestado que su pasión por la uva y la tradición vitivinícola se remonta a recuerdos de su infancia. Esta relación sentimental con el vino explica su interés por involucrarse en diferentes facetas del sector más allá del simple consumo.
A lo largo de su trayectoria como enófilo, Imanol Arias ha estado vinculado también como socio minoritario a otras bodegas, como fue el caso de Cepa 21. El actor ha mostrado públicamente su predilección por vinos de determinadas denominaciones de origen españolas, posicionándose como un auténtico conocedor y embajador de la enología nacional. Su figura representa un interesante puente entre el mundo de la cultura y el sector vitivinícola. La versatilidad de Imanol Arias le ha permitido desarrollar paralelamente su consolidada carrera interpretativa junto a sus proyectos vinícolas. Mientras continúa protagonizando nuevas producciones teatrales como 'Mejor no decirlo' junto a María Barranco, el actor mantiene viva su faceta como empresario y aficionado al mundo del vino.
Esta dualidad profesional representa un fenómeno cada vez más común entre figuras del espectáculo, quienes diversifican sus actividades hacia sectores como la gastronomía o la enología. En el caso de Arias, su aproximación parece sustentarse en una pasión auténtica más que en un mero ejercicio de marketing o inversión financiera. La presencia del actor esta noche en El Hormiguero junto a su compañera de reparto supone una oportunidad para que el público conozca no solo su próximo proyecto teatral, sino también esta faceta menos mediática pero igualmente significativa de su trayectoria profesional y personal vinculada al mundo del vino.
Los guiones para el personaje Alcántara se los harían a la medida.