Un grupo de expertos de la OSCE llegó este sábado al lugar donde hace dos días fue derribado un avión malasio con 300 pasajeros a bordo, en un campo abierto junto a la localidad de Grabovo, en la región de Donetsk, según pudo constatar Efe.
Tras mantener una discusión con los milicianos prorrusos armados que custodian el lugar de la tragedia, los expertos internacionales fueron obligados a dejar los coches en los que llegaron e internarse a pié en el campo donde permanecen desperdigados los restos del avión y los cuerpos de las víctimas del siniestro.