El expresidente de la Generalitat Artur Mas ha pedido este domingo a su sucesor Carles Puigdemont que anteponga "el interés del país" al suyo personal o el del partido, como hizo él cuando renunció a la presidencia de Cataluña en 2016. "Pero no quiero decir que haga lo mismo que yo", ha añadido.
"No quiero condicionar la decisión de Puigdemont. En estos momentos tan delicados y trascendentes tiene que pensar en el país", ha dicho Mas en una entrevista a La Sexta recogida por Europa Press ante la posible investidura del candidato de Junts per Catalunya como presidente de la Generalitat.
"Yo creo que Puigdemont actuará en función del interés del país", ha aventurado Mas sobre la disyuntiva de su sucesor entre ser investido telemáticamente o regresar a España y ser detenido, aunque ha proclamado que "nadie es imprescindible". "Lo imprescindible es cumplir los mandatos de las urnas", según Mas.
Sobre la investidura telemática que plantea Puigdemont, Mas ha admitido que "en circunstancias normales está fuera de la normalidad", pero ha defendido esa posibilidad ante el "momento de absoluta excepcionalidad" que existe en Cataluña.
"Lo normal no es esto, es gobernar desde el Palacio de la Generalitat, que es lo que hemos hecho todos desde el regreso de Tarradellas, pero Puigdemont se presentó diciendo que si tenía mayoría iba a restituir el Gobierno anterior y entiendo que esté forzando la situación hasta el punto que pueda para seguir el mandato de las urnas", ha explicado.
Mas, que el martes dimitió como presidente del PDeCAT, partido de Puigdemont, entiende que su sucesor en la Generalitat "está intentando llegar hasta el final" por "lógica democrática" al plantear ser investido en Bélgica, donde permanece desde finales de octubre tras la declaración unilateral de independencia del Parlament.
MAS "SE ENCONTRÓ" EL PROCÉS
Sobre el 'procés', Mas ha negado durante la entrevista que sea el responsable de haberlo puesto en marcha. "Yo no inicié este proceso, lo inició la gente, pero políticamente alguien lo tenía que canalizar. Yo me lo encontré", ha afirmado, reconociendo que fue un "error" imponer un plazo de 18 meses para lograr la independencia, y que el desafío soberanista ha tenido "consecuencias".
"El 'procés" ha llevado las cosas al límite", ha admitido Mas, "y al llevarlas ha habido consecuencias, pero hasta el 1 de octubre no había habido ninguna consecuencia y llevábamos cinco años, porque nadie había entendido que la independencia iba en serio", según el expresidente de la Generalitat, que se ha reafirmado en negar que la independencia provoque la fuga de empresas y entidades financieras de Cataluña.
"Sigo diciendo lo mismo, los bancos no se marchan del país. Otra cosa es que la sede social se traslade y se tomen decisiones que serán temporales o no. Evidentemente en la transición a un nuevo estado hay costes de transición, y desde el primer momento lo dije, no engañé a nadie: no será fácil", ha defendido.