La presidenta de la Federación Empresarial Hotelera de Ibiza y Formentera (Fehif), Ana Gordillo, aseguró ayer que «muy mal» debería evolucionar la situación de la pandemia del coronavirus para que los hoteles de las Pitiusas «se planteen no abrir».
Así lo afirmó la representante de los hoteleros, en una entrevista concedida al programa Bona Nit Pitiüses de TEF en la que trató de dibujar el panorama que se le presenta a su sector de cara a la temporada turística.
«El problema es que estamos ante una situación que no sabemos cómo va a evolucionar, ni en unas semanas, ni en unos días. Por ahora el calendario de previsiones que hay es poder abrir entre el 1 de junio y el 1 de julio, porque como se suele decir: la fe es lo último que se pierde», apuntó Gordillo.
Desde Fehif creen que la situación «va a remitir» y que de aquí a dos meses «podrían estar trabajando, tal vez no con el mismo volumen que tuvieron el año pasado porque probablemente será difícil de recuperar pero al menos el abrir». «Las cosas tendrían que evolucionar muy mal para plantearnos el no abrir», recalcó dirigente de los hoteleros pitiusos.
Los turistas marcarán el inicio
Para Gordillo, todo depende de «cómo se lleve a cabo el desconfinamiento paulatino», con las medidas que se vayan a mantener y las que se vayan a llevar a cabo, sobre todo en materia de movilidad: «si los turistas van a poder llegar a las islas, si nos vamos a poder mover tranquilamente por el territorio español, esto es imprescindible para poder marcar un inicio de temporada», remarcó.
Preguntada porque la posibilidad de que varias aerolíneas decidan no programar vuelos a Ibiza durante este verano, Gordillo indicó que lo que espera es que «cuando el mercado se reinicie, estas compañías se replanteen volar» y «opten por reanudar su actividad».
«A día de hoy, no se pueden plantear unas medidas porque la situación puede cambiar totalmente. Lo importante para Fehif es que dependemos de cómo se restablezcan estas condiciones aéreas y de cómo las compañías, que han sufrido incluso más que alguna empresa hotelera, pues se les dé la liquidez necesaria para que puedan reanudar la actividad», añadió.
Otro de los temas por los que fue interrogada fue por el tiempo que necesita un establecimiento hotelero para ponerse en marcha, algo que explicó que podría darse «al día siguiente si hace falta» pero matizó que su día uno «no será el día que se levante el estado de alarma, será cuando puedan llegar los clientes a la isla». «Los hoteles están parados porque no les queda otra y han tenido que cerrar, pero estamos listos para empezar a trabajar cuando se pueda», aclaró.
Otro de los protagonistas del Bona Nit Pitiüses fue el presidente de la Federació de la Petita i Mitjana Empresa d'Eivissa i Formentera (Pimeef), Alfonso Rojo, que desgranó la realidad por la que pasan los empresarios de las Pitiusas.
«En Pimeef nos hemos encontrado con todo el aluvión de empresarios que decían qué pasa o qué va a pasar e intentar solucionarles el camino sobre los cierres o los ERTEs que se han tenido que producir o el tema de los fijos discontinuos», afirmó Rojo.
El representante de los pequeños empresarios aseguró que el en estos momentos están recibiendo «entre 80 y 100 llamadas diarias», en un proceso en que la gente está «dudosa, para ver cómo está la financiación o cómo está el pago de sus obligaciones en los próximos meses».
«La mayoría de las llamadas era para saber qué iba a pasar con sus trabajadores y qué iba a pasar con los fijos discontinuos que en estas fechas se tendrían que incorporar. Después los empresarios han preguntado qué hay de lo mío pero eso ha sido después de solucionar el panorama de sus empresas», aclaró el presidente de Pimeef.
Rojo incidió que tras recoger las percepciones que le llegan de sus compañeros, la visión que tiene que el problema es que en estos momentos hay una legislación «vieja» y «todavía tienen que salir nuevas normativas que se adapten a esta realidad».
En cuanto a las medidas puestas en marcha por el Gobierno para paliar esta crisis en las pequeñas empresas y los autónomos, el representante de Pimeef advirtió que de los 200.000 millones de euros prometidos, solo 10.000 llegarán a las pymes: «a veces los discursos y los números rimbombantes se quedan en las palabras y los empresarios no los vemos». A lo que apostilló que en Baleares, el Govern ha destinado 75 millones a través del ISBA, que “a las empresas de las Pitiusas está llegando una parte importante, más que los créditos del ICO”.
EL APUNTE
El Govern balear mantendrá la ‘ecotasa'
El Govern balear aseguró ayer tajante que la posibilidad de dejar de cobrar la ecotasa este verano «no está sobre la mesa en estos momentos», según aseguraron ayer fuentes oficiales del departamento de Turismo que dirige Iago Negueruela. Por lo tanto, en el caso de que los hoteles puedan abrir sus puertas este verano, lo harán cobrando la ecotasa en los mismos términos que en el pasado verano. Los hoteleros de las Pitiusas han reclamado en los encuentros que han venido teniendo con la administración que no se cobre este impuesto «al menos esta temporada y la siguiente». La respuesta que habían recibido hasta ahora era, según Gordillo, que «nos lo estamos pensando». «La retirada de la ecotasa se ha planteado en reiteradas ocasiones, pero no hemos querido hacer especial propaganda con este mensaje, porque tampoco creemos que es el momento. El mensaje que hay que transmitir es que Baleares se vuelve a abrir al turismo», comentó. De este modo, pidió la anulación de la ecotasa para las temporadas 2020 y 2021, para así no perjudicar las llegadas.
Los hoteleros la burguesía ibicenca los que tratan a sus empleados como a ganado Van a perder sus hoteles porque la mayoría están endeudados y no va a venir nadie, otra oportunidad histórica para los Matutinos que se quedarán con la otra mitad de la isla, se acabó lo que se daba señores, tanta arrogancia tanta avaricia, nadie se podía imaginar ni en el peor de los casos que esto pasaría, se van a caer como naipes y los bancos se van a quedar con todo, los pobres seguiremos siendo pobres, el desastre está servido, prepárense para perder sus privilegios, como los perdió la burguesía inglesa después de la peste, a deu