Miembros de la empresa Desokupa señalaron ayer por la tarde a Periódico de Ibiza y Formentera que Alazne Rodrigo, la presunta estafadora de alquileres de Ibiza, sigue encerrada en la vivienda ubicada en la calle Jaume I de Sant Antoni porque «no encuentra apoyos para abandonar este piso». En este sentido, desde Desokupa explicaron que durante la jornada de ayer esta mujer estuvo llamando a varios conocidos de la isla para poder alojarse unos días con ellos y, así, abandonar este piso en el que lleva viviendo desde noviembre sin pagar el alquiler, según los propietarios Bea y Saúl. Además, también estuvo durante este tiempo, según dichas fuentes, subarrendando el resto de las habitaciones a diferentes inquilinos itinerantes. Hechos que ha ocasionado la apertura de un expediente sancionador contra esta mujer por alquiler turístico ilegal con una multa que abarca desde los 10.000 euros hasta los 400.000 euros. Procedimiento que fue notificado ayer por la Policía Local de Sant Antoni.
Además de esta notificación, el martes también se instaló el control de acceso por parte de la empresa Desopuka, un control que implica la presencia continuada de vigilantes en la entrada de la vivienda. Esta vigilancia, que empezó a las 16.00 horas de este martes, continuaba ayer en el rellano de este inmueble con la presencia de dos miembros de la entidad, los cuales se iban rotando para realizar la vigilancia. «Estamos intentando negociar con ella para que abandone el inmueble; incluso le estamos ofreciendo recursos de alojamientos alternativos como la estancia de una noche en un hotel de Ibiza», explicó uno de los vigilantes a este medio. En este sentido, agregó que durante el día de ayer Alazne Rodrigo se dedicó a llamar a diferentes contactos para solicitar apoyo social. Entre estos contactos, según la empresa Desokupa, estaba una asociación benéfica de la isla. «Ella nos dice que quiere abandonar la casa, pero no tiene los medios», subrayó uno de los miembros de la entidad, mientras informaba de que ayer por la tarde un inquilino de este piso interpuso una denuncia contra ella.
«Este joven lleva desde el martes sin poder acceder a la vivienda porque esta mujer se ha encerrado en el piso y no quiere salir. Este chico ha ido a la Guardia Civil para interponer una denuncia por un delito de coacción porque esta mujer le niega el acceso al domicilio», señalaron desde la entidad, resaltando que tras esta acusación esperan que «la Guardia Civil pueda denunciar estos hechos y la Fiscalía actúe de forma inmediata». «Lo que está claro es que esta mujer no puede quedarse mucho tiempo más en la vivienda y dejar en la calle al que era su compañero de piso, el cual ha tenido que dormir esta última noche en casa de un amigo», añadieron desde esta empresa, mientras seguían realizando la vigilancia en el rellano de la vivienda.
Según ha comprobado Periódico de Ibiza y Formentera in situ a raíz de testimonios de vecinos de la zona, esta joven perturbó el descanso vecinal la noche del martes al miércoles con gritos entre las 02.00 horas y las 04.00 horas. Los vecinos este miércoles por la mañana comentaban en corrillos la surrealista situación en la que se ha visto inmersa esa zona y la finca donde está el piso por culpa de esta joven.