El director del Club Náutico, Vicent Canals, destacó ayer a Periódico de Ibiza y Formentera que varios amarres del Port Náutic Ibiza se han quedado vacíos tras la marcha de embarcaciones de base. En total, tanto Canals como la presidenta de la Asociación de amarristas del CNI, Nahiara Cardona, calculan que se han marchado a otro puerto deportivo entre 20 y 30 barcos.
«Hay amarristas que se han ido a Santa Eulària e incluso hay otros que se han marchado al puerto de Palma», subrayó Canals, destacando la gran diferencia de precios entre ambas islas: «Si en este puerto te cuesta el amarre 30.000 euros anuales, en Palma cuesta 8.000 euros», señaló. Apuntó que estas tarifas se han multiplicado por 3,5 en relación a los barcos con más de 8 metros de eslora y con menos eslora por 1,5 menos: «Antes cerrábamos el presupuesto con un importe para los amarristas de 0,28 euros por metro cuadrado al año».
También indicó que reflotarán esta situación gracias a sus socios, que son el «pulmón» del CNI. «Somos de todo menos un club social muerto y seguimos trabajando en nuestras iniciativas recreativas y culturales; volveremos a nuestras instalaciones», precisó.