Dos décadas han tenido que esperar los payeses de la comunidad de regantes de la balsa de sa Rota para poder usar el agua almacenada en esta infraestructura. No es extraño, por tanto, que la presidenta del Govern, Marga Prohens, se desplazara hasta Ibiza para anunciar la puesta en marcha de esta balsa de riego y que calificara el día de ayer como de «histórico». «Los payeses de Santa Eulària estaban esperando esta balsa y por los problemas de salinización no había sido posible», señaló Prohens.
En el mismo sentido se expresaron el presidente del Consell d'Eivissa, Vicent Marí, y la alcaldesa de Santa Eulària, Carmen Ferrer, quienes se felicitaron por que la balsa permitirá «poder reutilizar el agua y la recuperación de los acuíferos».
19 regantes
La balsa de riego fue construida por el Ministerio de Agricultura en 2003. Sin embargo, la alta salinización del agua procedente de la depuradora de Santa Eulària hizo inviable su puesta en marcha. La balsa tiene una capacidad de 180.000 m3 y cuenta con una red de riego de 8 kilómetros con 45 hidrantes, de los que a 12 de ellos les llega el agua por gravedad y a los 33 restantes por impulsión. La superficie total de regadío es de 114 hectáreas.
Sin embargo, la tardanza de más de veinte años en la puesta en marcha de la balsa de riego ha supuesto que en la actualidad tan solo haya 19 regantes de Santa Eulària y Sant Llorenç en activo, la gran mayoría con huertos de cítricos y que suman alrededor de 30 hectáreas. Una cifra que se espera aumentar ahora que ya está en funcionamiento esta infraestructura hídrica.
El director general de Agricultura, Fernando Fernández, explicó que para solucionar el problema de la salinidad se decidió en la pasada legislatura mezclar agua depurada con desalada, por lo que se ejecutó una inversión de 600.000 euros para conectar la balsa de riego con la desaladora de Santa Eulària.
Además de para regar, la balsa de sa Rota se aprovechará para las labores de extinción de incendios forestales y servirá como refugio para las aves y las labores de polinización de las abejas.
La balsa de riego se encuentra ahora mismo al 50 % de su capacidad y se espera que después del verano, cuando ya no sea necesario utilizar todo el agua de la desaladora para el consumo humano, se pueda ir llenando la infraestructura hídrica y mejorando los niveles de salinidad del agua para que los regantes puedan utilizarla en primavera.
«Es un día de alegría y muy importante para Ibiza, especialmente para los payeses de Santa Eulària y Sant Llorenç, que son los primeros beneficiarios de este sistema de riego con agua depurada», destacó Vicent Marí.
El presidente del Consell d'Eivissa señaló que la puesta en marcha de la balsa de sa Rota «es un avance muy importante. El agua es un bien preciado y ahora este agua tendrá una segunda oportunidad y permitirá recargar los acuíferos».