El grupo municipal Vox en Sant Josep ha considerado que «la extrema izquierda no acepta la derrota electoral» y, por ello, los concejales del partido han sido denunciados por un delito de odio.
«Todo es delito para los intransigentes cuando no les gusta el resultado de las urnas», ha dicho Vox en un comunicado.
Según han explicado desde la formación política, la Asociación Dones Progressistes de Ibiza ha interpuesto la denuncia, «mientras los juzgados de Ibiza están colapsados y sus funcionarios al borde de la extenuación laboral», porque «desea meter en la cárcel a los representantes electos del pueblo, a nuestros concejales».
Sin embargo, han lamentado, «no luchan por todas las mujeres, no denuncian que el gobierno progresista de la anterior legislatura en Baleares olvidara a unas niñas tuteladas que cayeron en la prostitución, no buscan una solución al problema de la vivienda o intentan acabar con las colas del hambre que inundan nuestras calles».
Desde Vox han señalado que no van a permitir que les sigan amenazando «con denuncias inútiles que no van a ninguna parte».